Emily Dickinson nació como la hija mediana de Edward y Emily Norcross Dickinson el 10 de diciembre de 1830 en el Homestead (la casa familiar) en la calle Main en Amherst, Massachusetts. Sus padres y hermano mayor, Austin, se habían mudado a la casa solo dos meses antes, para vivir con los padres de Edward, Samuel Fowler y Lucretia Gunn Dickinson, y unos de los hermanos de Edward.
Poco después del nacimiento de la hermana menor de Emily, Lavinia, en 1833, sus abuelos se mudaron a Ohio tras años de inquietantes problemas económicos en Amherst. El Homestead se vendió, pero la familia de Emily permaneció en la casa como inquilinos por siete años después.
Condiciones abarrotadas y la creciente carrera legal y política de Edward exigían una nueva vivienda, y cuando Emily tenía nueve años, su familia compró una casa en lo que se considera actualmente la calle de North Pleasant en Amherst. Dickinson tenía una relación estrecha con sus hermanos Austin y Lavinia, y tenía un cariño a la casa en calle Pleasant. Pasaba su tiempo con las tareas domésticas como la repostería y la jardinería además de asistir a la escuela, participar en reuniones de la iglesia, leer libros, aprender a cantar y tocar el piano, escribir cartas y dar paseos.
La educación formal que recibió Dickinson superó la que recibían las niñas normalmente a principios del siglo XIX, pero no fue excepcional para las niñas de Amherst. Después de un tiempo en una escuela del distrito de Amherst, asistió a la Academia de Amherst durante unos siete años antes de ingresar al Seminario Femenino Mount Holyoke (actualmente la Universidad Mount Holyoke College) en 1847. Pasó un año en el Seminario, el periodo de tiempo más largo que se quedó fuera de casa.
En su juventud Dickinson expresó un aptitud social que se redujo a medida que maduraba: “I am growing handsome very fast indeed! I expect I shall be the belle of Amherst when I reach my 17th year. I don’t doubt that I will have crowds of admirers at that age.” [“¡Rápidamente me estoy volviendo guapa! Espero ser la bella de Amherst cuando cumpla los 17 años. Supongo que tendré multitud de admiradores a esa edad”] (L6). Se deleitó en numerosas amistades con amigas como Abiah Root, Abby Wood, Emily Fowler y Susan Gilbert, quien luego se convirtió en su cuñada. Aunque Dickinson nunca se casó, tuvo varios amigos varones importantes, entre ellos Benjamin Newton, de quien Dickinson recibió su amada copia de Poems de Emerson, y Henry Vaughn Emmons, con quien compartió algunos de sus primeros poemas. Unas pruebas indican que recibió al menos una propuesta de matrimonio, de George H. Gould, un graduado de Amherst College, de la que no resultó nada.
Los años de juventud de Dickinson también tuvieron momentos de perturbación. Las muertes de amigos y parientes, hasta su joven prima Sophia Holland, le hicieron pensar en la muerte y la inmortalidad. Su casa de la calle Pleasant, ubicada cerca del cementerio, no permitió que Dickinson ignorara los entierros frecuentes que luego proporcionaron poderosas imágenes a sus poemas.
Una ola de avivamientos religiosos en la adolescencia de Dickinson respondió a la preocupación de su sociedad calvinista por la disposición del alma humana. Aunque los amigos, la hermana, el padre y luego el hermano de Dickinson se unieron a la iglesia (su madre ya se había unido, el año después del nacimiento de Emily), Emily nunca lo hizo, y comentó claramente a un amigo: “ I am one of the lingering bad ones” [“Soy uno de los malos persistentes”] (L36).
A principios de sus años veinte, a Dickinson le importaba cada vez más la escritura. Le escribió a Austin una carta que le regaña por escribir poesía, en esa misma carta Dickinson revela algo más significativo sobre sí misma: “I’ve been in the habit myself of writing some few things, and it rather appears to me that you’re getting away my patent, so you’d better be somewhat careful, or I’ll call the police!” [“Yo también tengo el hábito de escribir algunas cosas, y me parece que estás ocupando el oficio mío, así que ten algo de cuidado o llamaré a la policía.”] (L110) Sus primeros escritos todavía existentes, que son cartas del día de San Valentín y poco característicos de su obra posterior, se publicaron de forma anónima. Una carta (“Magnum bonum, harem scarum”) apareció en la publicación estudiantil The Indicator de la Universidad de Amherst College en 1850, y un poema “Sic transit gloria mundi”, en el periodico Springfield Daily Republican en 1852.
Las cartas de Dickinson a su hermano revelan también un aumento del sentido de “diferencia” entre ella y los demás: “What makes a few of us so different from others? It’s a question I often ask myself” [“¿Qué nos hace a unos pocos tan diferentes de los otros? Esta pregunta me la entrego a mí mismo a menudo”] (L118). Este sentido de diferencia se hizo más pronunciado a medida que Dickinson envejecía y su sensibilidad poética maduraba.